martes, 26 de enero de 2010

El Doctor Balmis "Un luchador contra la viruela"

En 1803, a los escasos cincos años de haberse dado a conocer al mundo el descubrimiento de la vacuna contra la viruela por el médico Inglés Edward Jenner, el entonces rey de España Carlos IV, ordena la partida de la Real Expedición Filantrópica de la Vacuna encabezada por su precursor, el doctor alicantino Francisco Javier Balmis Berenguer, y el cirujano catalán José Salvany Lleopart como subdirector, auxiliados por dos ayudantes médicos, dos practicantes y cuatro enfermeros.

(Retrato del Dr. Balmis)


La Expedición, considerada la primera expedición sanitaria internacional en la historia, parte del puerto de La Coruña, el 30 de noviembre de 1803 en la corbeta “María Pita” con 23 niños, de entre 8 y 10 años de edad, de la Casa de Expósitos de La Coruña al cuidado de doña Isabel López Gandalla su rectora. La vacuna se transmitía entre los menores, brazo a brazo, desde España, vía Tenerife, Islas Canarias, hasta San Juan de Puerto Rico, donde llegaron el 9 de febrero de 1804.

La vacuna prendía en los niños de corta edad con más facilidad. Con una lanceta impregnada del fluido, Balmis les realizaba una incisión superficial en el hombro, y unos días después surgían los granos vacuníferos que emanaban el fluido antes de secarse definitivamente.

La expedición recorre durante dos años Venezuela, Cuba, Yucatán, México y Filipinas, para después arribar a Macao y Cantón antes de regresar a España, teniéndose que enfrentar a los peligros que supone en aquellos tiempos, los piratas, los naufragios y temporales, y a la oposición de los religiosos a la vacunación.

Un problema añadido lo constituía el hecho de que los niños, una vez vacunados, ya no podían emplearse de nuevo en la cadena de transmisión. Debido precisamente a ello, la expedición se veía obligada a reclutar nuevos menores de las casas de huérfanos.


(Monumento en el puerto de La Coruña en homenaje a los niños que partieron en la expedición)


Conociendo que la vacuna no había alcanzado China, Balmis solicita y se le concede el permiso para marchar hacia Macao, partiendo de Manila el 3 de septiembre de 1805.


(Sello commemorativo del bicentenario de la expedición)

Balmis arriba finalmente tras un accidentado viaje a la colonia portuguesa de Macao y el 5 de octubre de 1805 se adentró en territorio chino vacunando hasta llegar a la provincia de Cantón (Guangzhou).

En su camino de regreso a España, convencen a las autoridades británicas de la isla de Santa Helena en 1806 para que tomasen la vacuna.


(Busto del Dr. Balmis en la facultad de medicina de Alicante)

El propio descubridor de la vacuna de la viruela Edward Jenner escribió sobre la expedición:

“No puedo imaginar que en los anales de la Historia se proporcione un ejemplo de filantropía mas noble y mas amplio que este.”

9 comentarios:

  1. Excelente! muy buena recopilacion de informacion ;)

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  2. Hay que leer el libro llamado Angeles Custodios de Almudena de Arteaga para imaginar lo que fue esa maravillosa expedicion

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  3. Muy buen aporte, también el libro de "Ángeles Custodios" :)

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  4. yo recomiendo el libro "los hijos del cielo"

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  5. Lo que no se dice, entre otras cosas, es que por falta de recursos, se abandonaron a los 23 niños en México, a su suerte, como conejillos de indias usados por los doctores: el fin justifica los medios.

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  6. Muy buen comentario, aun que con un poco más de su vida privada quedaría mejor

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  7. gracias por la información

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  8. ironías de la vida, los españoles traen la enfermedad, diezma la población indígena y siglos después traen la vacuna.

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